La manta de apego es un objeto que genera una sensación de protección y confianza al bebé, indispensable a la hora de dormir para dar seguridad e independencia.
Se recomienda que durante los primeros días la mamita tenga la manta cerca para que esta conserve el olor de ella y se pueda transmitir al bebé, de esta manera sentirá compañía permanente. Esta manta permite al bebé transitar a una etapa más independiente, con mayor tranquilidad.
Los padres deben entender que este objeto es muy importante para el bebé y no deben presionar para que se aparte de él, pues cada bebé tiene etapas y experiencias diferentes, en algún momento cuando él este preparado irá dejando de lado la manta.